*Reviven caso de ex auditor Esparza.
*Giran orden de aprehensión contra ex empleado de la ASE.
*Que Loera no renunció, lo corrieron.
*Presionaron para que saliera por la puerta trasera.
*Con Naftalina reviven a Tero Murguía para ser candidato.
En el caso que se le sigue al extitular de la Auditoría Superior del Estado, Jesús Manuel E.F., así como a sus hijos, todos vinculados a proceso desde el 15 de julio del presente año, el día de ayer hubo movimiento.
Se trata de un amparo promovido por otra persona vinculada al hecho, (“coimputado” se maneja en la carpeta de investigación), un tal Roberto T.P. -que no es Testigo Protegido, que quede claro-.
Roberto laboró como Jefe de Contabilidad de la ASE, mismo que recibió el 27 de noviembre de 2015, en su cuenta bancaria de Santander, 3 transferencias, una por 465 mil 893 pesos, otra por 354 mil 893 pesos, y una más por 329 mil 214 morlacos que corresponden a los supuestos actos de disposición ilegal de dinero público llevados a cabo por Jesús Manuel E.F.
El amparo procedió y todo parecía que Roberto T.P. saldría libre, pero en la audiencia privada se libró otra nueva orden de aprehensión en su contra, por lo que el gozo jurídico se fue al pozo de las lamentaciones legales.
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Según los entendidos en la materia, la renuncia de Juan Carlos Loera de la Rosa de la delegación de Bienestar fue forzada, ya que su posición se había vuelto insostenible.
Con su salida, muchos miembros de Morena han podido respirar un poco más tranquilos. Lejos de contribuir a las causas de la 4ta Transformación, Loera de la Rosa estaba provocando un retroceso debido a serios cuestionamientos por presuntos actos de nepotismo, corrupción y prepotencia.
Loera de la Rosa afirmó que su renuncia fue para buscar la postulación a un cargo de elección popular, ya sea una Senaduría o incluso la alcaldía de Juárez. Sin embargo, las posibilidades de que logre ser el candidato a alguna de ellas parecen muy difícil.
La renuncia de Loera de la Rosa ha dejado un vacío en la delegación de Bienestar, pero también ha abierto la puerta a nuevas oportunidades y posibilidades para Morena.
Lo cierto es que Loera lo tuvo todo para mantenerse como líder absoluto de Morena en el estado, pero su soberbia e ínfulas de poder lo llevaron al fracaso, por lo menos por ahora.
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Como vil camaleón Héctor “Teto” Murguía ha cambiado de camuflaje o como dirían en Ciudad Juárez «la víbora ha cambiado de piel».
Y es que el ex dos veces alcalde de esta frontera dejó ver una sorprendente transición ideológica de derecha a la izquierda. Mostró el más puro pragmatismo político.
El Teto Murguía, ha sorprendido a muchos al renunciar a su larga militancia en el Partido Revolucionario Institucional, el mismo que le permitió llegar al Congreso de la Unión y a la presidencia municipal de Juárez en dos ocasiones. Ahora, se ha unido a la cuarta transformación, conocida como la 4T, al comunismo intransigente de Gerardo Fernández Noroña.
Murguía ha dejado de lado los principios y la causa por la que luchó durante varios años para convertirse en aspirante a la senaduría y sumar votos a la izquierda de Andrés Manuel López Obrador. Ahora, apoya las políticas de “abrazos, no balazos”, a pesar de la creciente inseguridad, la falta de medicinas y los problemas en los programas de salud del presidente López Obrador.
Además, Murguía respalda los problemas financieros de Pemex y de la CFE, así como los proyectos favoritos de AMLO, como el Tren Maya y la refinería Dos Bocas, a pesar de las críticas que estos han recibido.
Recientemente, Murguía viajó a la Ciudad de México para unirse al Partido del Trabajo en busca de una candidatura al Senado. La diputada Lilia Aguilar Gil expresó que en Chihuahua se está viviendo una revolución debido a la renuncia de Murguía al PRI después de 50 años de militancia. Murguía, por su parte, agradeció la invitación para integrarse al PT y afirmó que está convencido de que hay que estar del lado de la gente buena, de gente con conciencia social.